lunes, 28 de mayo de 2012

Silvia Parra: "La clase política no está al servicio del pueblo"

Nombre: Silvia Parra
Edad: 36
Profesión: Periodista y profesora de español para extranjeros (ELE)
Nivel de estudios: Licenciatura
Lugar de nacimiento: Terrassa (Barcelona)
País de residencia: Canadá y el año que viene Nueva Zelanda

¿Cómo surge la idea de marcharse fuera de España?
No pude hacer Erasmus por problemas económicos así que tenia muchas ganas de irme. En 2008, antes de la crisis, cogí mi mochila y mis ahorros y me fui a Nueva Zelanda a conseguir un inglés alto. Tras un año allí (y casarme con mi novio neozelandés) , volví en plena crisis. Encontré un trabajo por encima de los mil euros, pero ya tenia el gusanito de ir al extranjero, donde he tenido más suerte en cuanto al trato de los jefes y la motivación. Y al año me volví a ir, esta vez a Canadá.
¿Trabajaba en el momento de tomar la decisión de marcharse?
Sí, estaba trabajando en el Banco Sabadell de atención telefónica y también en el equipo de Redes Sociales, pero el nivel de estrés era alto. Además mi marido, neozelandés que sólo habla inglés, no encontraba nada y estaba desesperado, así que el mío era un sueldo para dos bocas.
¿Le costaba encontrar trabajo “de lo suyo” en España? ¿Eran buenas las condiciones económicas?
De periodista está imposible desde hace años. No solamente porque está de moda y hay una cantidad increíble de licenciados en periodismo, sino porque a eso se le une un altísimo porcentaje de intrusismo. No hay una ley que obligue al empresario periodístico a contratar a un periodista licenciado, así que hay muchas personas sin formación trabajando de periodista con sueldos míseros. Miles de pseudeperiodistas, así esta la calidad de los medios de comunicación... En todo caso, hace tiempo que me “queme” de las condiciones de trabajo y como el Periodismo es difícil ejercerlo en otro país, he trabajado de otras cosas.
¿Cómo está siendo la experiencia de vivir y trabajar fuera?
Ha habido altibajos, es difícil empezar, a mi me echo la mano un manchego. Es difícil que confíen en ti para cualquier trabajo, ya que el inmigrante es el último y hay prejuicio siempre (aunque no haya racismo). Pero lo volvería a hacer. De hecho no pienso volver mientras tenga un dólar en el bolsillo. Me siento mucho más valorada como trabajadora, entro y salgo feliz a trabajar a mi puesto. Conozco gente nueva, aprendo muchas cosas nuevas cada día.
¿Considera que las condiciones, tanto laborales como sociales, son mejores en su actual lugar de residencia?
Sí, el trato de los jefes es de supervisión y no de penalización. En los errores no hay broncas, sólo conversaciones. En los aciertos hay felicitaciones, continuamente. El sueldo no es malo y hay posibilidad de hacer horas extras así que todo el mundo está feliz en el trabajo porque va desahogado. Socialmente la falta de desempleo baja el nivel de delincuencia, toda la gente es más feliz, más tranquila, más amable en la calle. En España nos hacen creen que somos malos trabajadores, que nos distraemos, que no rendimos... pero es mentira, les damos mil vueltas a otros trabajadores de países ricos.
¿Echa de menos España? Si las cosas estuvieran mejor ¿se plantearía volver? 
Echo de menos la familia y amigos, y el poder explorar Europa en vuelos low-cost ya que me encanta la historia y en Canadá hay mucho espacio vacío :-) Pero mucho tendrían que mejorar para que ambos tuviéramos trabajo de lo nuestro, o al menos un trabajo digno, con sueldo digno y trato digno.
Cuánto de culpa cree que tiene España, sus políticos, gobernantes e instituciones de su marcha
Casi toda. Yo he cumplido mi parte: buena estudiante, buena ciudadana, con carrera y trabajadora. Ellos no me han procurado unas leyes que reserve el trabajo de periodista al licenciado en periodismo, me han dado contratos basura, contratos de becario sin sueldo, sin acceso a una vivienda a un precio de mercado real... en fin, estoy muy decepcionada de la clase política, unos mediocres que se creen muy listos y se hacen los tontos para aprovecharse de los fallos del sistema en vez de corregirlos.
¿Considera positiva su experiencia actual?
Tuve mala suerte los 6 primeros meses, con trabajos infracualificados y sueldos bajos, también a veces es cuestión de suerte. Desde hace 5 meses en mi nuevo trabajo todo ha sido súper positivo. Lástima que las leyes de inmigración en Canadá están poniéndose bastante duras y a pesar de tener contrato en vigor y mi empresa quiere esponsorizarme, el gobierno me ha denegado el permiso de trabajo para un segundo año. Aún así, ha sido una experiencia dura al principio, pero emocionante y lo que importa es que al final de la etapa ha ido bien.
¿Se considera emigrante? ¿Cómo lo valora?
Por supuesto que soy emigrante, y valgo lo mismo o más que otros trabajadores canadienses pero ellos no piensan lo mismo :-) Es como un tatuaje que llevas en la frente y que te limita tus posibilidades de futuro a corto plazo.
¿Vive con cierta frustración la actual situación? ¿Impotencia de luchar contra gigantes inalcanzables?
Sí, bastante frustración, dado que siempre he pensado que la clase política no está al servicio del pueblo que le elije, pero estos años me han convencido totalmente de ello. También en España hay un problema de mentalidad, se premia a los empleados mediocres, con mal genio o chivatos. No se motiva a los que tienen talento. Eso ya no es culpa de los políticos.
¿Es usted una indignada?
Totalmente. Desde antes que estallara la crisis ya me fui indignada por la falta de oportunidades para una licenciada en periodismo, donde un escote bonito te daba un trabajo en TV antes que un CV interesante. Sin hablar de la tele basura y el entretenimiento bobo, claro, eso no lo considero trabajo para periodistas se ponga la Milá como se ponga...
¿Hubiese pensado verse en esta situación hace unos años?
Los periodistas, al igual que los investigadores, ya llevábamos años malos mucho antes que estallara la crisis, así que hace tiempo que sabía que acabaría yéndome.
Cuénteme un sueño recurrente que tenga con la posibilidad de volver a España
La verdad que no sueño con volver, la capacidad adquisitiva española es patética y el trato al trabajador es para deprimir a cualquiera. Volvería para ir a Centro Europa si pudiera dedicarme a periodismo en redes sociales o profesora de español, y si mi marido pudiera dedicarse a lo suyo, guía de montaña y monitor de kayak, entre otros. Imposible, vaya.
Por último, qué mensaje le gustaría dirigir a la clase política española
Que son unos fracasados que no piensan más allá de cuatro años y entre todos, sí entre todos, nos han hundido cerrando el paso a las mejores generaciones de la HISTORIA del país. Debíamos ser los que pagáramos las pensiones de la población que envejece, pero con tales sueldos nos vamos a que nos aprovechen otros. Y que o bien son unas adineradas marionetas o bien son la colección de los más tontos del país. Otra explicación no le veo.

4 comentarios:

  1. ni Terrassa ni Barcelona son España por más que estén bajo control del Reino de España.

    Terrassa y Barcelona estan en Catalunya.

    ResponderEliminar
  2. Hola Silvia, me gustaría darte muchos ánimos. Me siento muy identificada con tu historia. Soy una periodista de 30 años y como tú no he parado. Tampoco pude hacer un erasmus porque mis padres no tenían dinero para pagármelo. Durante toda la carrera alterné trabajos de camarera, promotora, prácticas de periodista, cursos de idiomas, cursos de diseño gráfico, cursosde foto, y voluntariado en los veranos a países extranjeros. Al acabar la carrera me fui a Londres con una beca Leonardo para trabajar como periodista y ... por supuesto nuevamente como camarera (para llegar a fin de mes porque una beca de 500 euros al mes en Londres no te da para mucho...). Al volver a Madrid en 2007, y pensando que me iba a comer el mundo y que encontraría un trabajo bien pagado, me encontré con trabajos sin contrato, temporales y mal pagados. Afortunadamente no todo es malo. En Londres viví momentos inolvidables y encontré a mi novio belga. Y tras cuatro años en Madrid, hemos decidido ir a Bélgica los dos a buscarnos la vida. Ahora estamos en ese periodo que tú dices de los seis primeros meses, asustados porque se van los ahorros, porque no tenemos paro y porque aún no hemos encontrado trabajo. Esa es la peor parte: la ansiedad y el miedo ante demasiada incertidumbre. Pero tenemos esperanzas, sueños y sobre todo seguimos conservando el espíritu de seguir aprendiendo. Mucha suerte y muchos ánimos! Fdo: Otra periodista española emigrante ;)

    ResponderEliminar
  3. pues si no se para de luchar cada dia para poder salir del hoyo y llegar a fin de mes. Seguro que vais a tener suerte, los periodistas servimos para todo, todoterrenos! mucha suerte

    ResponderEliminar
  4. Silvia, creo que eres con quien hace años tuvimos intercambio de cartas y fotografías desde Terrasa a Morelia.. Si lees esto, me gustaría volver a contactarte. Mi correo es a3260147@gmail.com Milton.

    ResponderEliminar